Seguidores

jueves, 2 de julio de 2015

06 VIVIR CON EL BAAL SHEM TOV

  POR FIN EL BAAL SHEM TOV ACEPTÓ BAJAR A ESTE MUNDO

  Durante 500 años trataron los grandes tzadikim con insistencia, ruegos y plegarias de bajar el alma del Baal Shem Tov a este mundo. No lo lograron porque el Baal Shem Tov no aceptó. Hasta que hubo un despertar tremendo en el Cielo, por la llegada del tiempo de la redención, y ya no se puede seguir más, “¡hasta cuando!”.
Pero en el Cielo, en lo Alto hay dos grupos. Uno decía que ya no se podía soportar ni un instante más de exilio, de sufrimiento del Pueblo de Israel, de la comunidad de Israel. Necesitamos la redención y el Mashíaj ya.
Pero el segundo grupo argumentó en contra. ¿Para qué tiene que venir el Mashíaj? Hay muchas almas que todavía no llegaron a su rectificación. ¿Qué sucederá con todas esas almas?
Por cuanto que había esta disputa en el Cielo, fueron a preguntarle a esa gran alma, un alma que está unida en esencia con el Rey Mashíaj, el alma del Baal Shem Tov. ¿Qué dices, cuál es tu dictamen? El Baal Shem Tov escuchó que existía esta confusión, y dictaminó como que está escrito en el Tanaj [Shmuel II 14:14]:
לבלתי ידח ממנו נדח
lebilti idaj mimeno nidaj
“ningún alejado quedará alejado de Él”. 
Significa que ningún alma quedará sin su rectificación.

En el instante en que dijo este verso con su significado, “ningún alejado quedará alejado de Él”, dictaminó a favor de los que sostenían que no era posible traer la redención hasta que todas las almas tengan su rectificación. Entonces dijeron en el Cielo: “entonces, durante quinientos años tratamos de convencerte para que bajes a este mundo y no aceptas. Pero ahora tu propia boca lo dijo, te ha hecho hacer un desliz. Sólo tú puedes rectificar esas almas abajo. Y por cuanto que “ningún alejado quedará alejado de Él”, hay que rectificar todas las almas, así lo dices tú, así lo dictaminas, tienes que bajar a este mundo y rectificar las almas. Y así fue.


Con la ayuda de Dios Bendito el momento ha llegado, y 
¡QUEREMOS MASHIAJ YA!

No hay comentarios:

Publicar un comentario