LOS 32 MANANTIALES
Un portal hacia la Cabalá y el Jasidut en español del Instituto GAL EINAI de Israel
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miércoles, 20 de noviembre de 2024
sábado, 16 de noviembre de 2024
5785 Jaie Sará
BS"D
JAIE SARA חַיֵּי שָׂרָה
Génesis 23:1-25:18 Haftara: Reyes I 1:1-31
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LA
CUARTA REVOLUCIÓN
ALMAS MEZCLADAS
En las
primeras generaciones del pueblo de Israel existían divisiones claras: una
división general entre los sabios de la Torá (javerim) y la gente
del pueblo (am ha’aretz), divisiones específicas entre las
tribus, y más adelante, divisiones según roles definidos o niveles espirituales
(descritos con precisión en la Cabalá). Sin embargo, a medida que pasaron las
generaciones, surgió una mezcla: una mezcla entre las tribus, entre los
diferentes estamentos y funciones, e incluso entre las almas y sus niveles. En
un nivel profundo, explica el jasidismo, esta mezcla ocurre incluso dentro de
cada alma en sí misma: una misma persona puede ser, en momentos de lucidez
espiritual (gadlut mojin), poseedor de un alma elevada, y en
momentos de limitación espiritual (katnut mojin), poseedor de un
alma más baja, haciendo difícil clasificar o definir.
A primera
vista, esta mezcla parece negativa. Cuando hay definiciones claras, cada uno
puede cumplir con su rol particular y cuidarse de los peligros específicos que
lo amenazan. En cambio, cuando hay mezcla, los roles no están definidos, y cada
individuo debe cuidarse de todos los peligros espirituales: tanto por el
bienestar de su entorno, debido a la mezcla que lo rodea, como por las amenazas
que lo afectan personalmente, debido a la confusión interna en su propia alma.
Sin
embargo, esta mezcla también tiene aspectos positivos. Las divisiones generaban
polarización, desgarraban al pueblo y producían fenómenos de arrogancia y alienación,
por un lado, y de desesperación y pérdida de rumbo por otro. El jasidismo vino
a sanar estas fracturas en el pueblo, a reconectar a los sabios de la Torá con
los judíos simples, de manera que cada uno pueda reconocer y aprender de las
virtudes del otro, uniendo a todos en un servicio igualitario a Dios, en el
cual “el rico no será distinguido del pobre”.
Además, así
como la mezcla obliga a las almas elevadas a cuidarse de los peligros que
enfrentan las almas más bajas, fomentando la responsabilidad mutua, también
permite revelar en las almas más bajas los niveles de las almas más elevadas.
Cuando los jasidim y su Rebe se conectan a través del camino jasídico,
la profunda mirada del Rebe logra descubrir en sus jasidim cualidades
propias de almas elevadas, demostrando que, en la raíz más alta, todos los
judíos pertenecen a los niveles más sublimes. Así, el *Rebe* puede convertir a
sus jasidim en emisarios capaces de enfrentar grandes desafíos y cumplir
misiones trascendentales, tal como él mismo.
En un nivel
más profundo, la mezcla entre las almas refleja la mezcla en la realidad del
mundo. El mundo avanza hacia una interdisciplinariedad, una unidad y una
conexión entre diferentes áreas, donde el punto culminante mesiánico será la
unión de lo sagrado y lo profano, la sabiduría de la Torá y la sabiduría
científica. Este es un diluvio sagrado que mezcla y confunde entre todos los
ámbitos, conectando lo que desciende de las “compuertas de los cielos” con lo
que asciende de “los manantiales del gran abismo”.
Este cambio
en la realidad del mundo (en el jefetz) exige una adaptación en
las almas (el gavra): la visión de unidad demanda que las almas
también se vuelvan interdisciplinarias, conectando el mundo profano con el
mundo sagrado, corrigiendo lo profano y generando renovación y elevación en lo
sagrado. La mezcla en la realidad del mundo, que provocó que muchas almas
fueran expulsadas del ámbito sagrado y se extraviaran en campos ajenos,
finalmente dio lugar al surgimiento de nuevas almas: las almas de los baalei
teshuvá, en quienes la Divina Providencia generó una mezcla de sagrado
y profano, permitiéndoles materializar plenamente la visión de la unidad y
transmitirla a todos los tipos de almas del mundo. Esto incluye tanto a las
almas de Israel en sus diversas expresiones - cuyo rol es iluminar a todas las
naciones del mundo con la luz de la verdad y la unidad– como a las almas de las
demás naciones, que deben recibir esta luz del pueblo de Israel.
FUERZA PARA LA REVOLUCIÓN
Sobre la eternidad y el
cambio en la Torá, en Israel y en Di-s
Resumen
del desarrollo de la lección
La celebración de Simjat Beit Hashoevá
este año también fue una alegría de la Torá: el lanzamiento del libro La
Cuarta Revolución, tan esperado por mucho tiempo. Este libro describe las
cuatro revoluciones en el estudio de la Torá:
1.
La
revolución de la escritura de la Torá Oral.
2.
La
revolución del estudio de la Torá remunerado.
3.
La
revolución del estudio de la Torá para mujeres.
4.
La
cúspide, la cuarta revolución: el estudio de la Torá para las naciones del
mundo.
La lección dedicada a este tema abordó el
punto más sensible: ¿cuál es la fuerza que permite una revolución en la Torá y,
en esencia, ¿cómo es posible hablar de cambio y revolución en una Torá que es
inmutable?
·
Capítulo 1: Explica que para las tareas de nuestra
generación – la lucha contra los enemigos de Israel y la aproximación al mundo
entero – se requiere en el alma una cualidad de fortaleza que impulse
revoluciones, una audacia sagrada acompañada de humildad.
·
·
Capítulo 2: Aborda los dos aspectos de la Torá: la
verdad inmutable y la fortaleza del cambio, que representan el objeto (jéftza)
y el sujeto (gavrà), la mente y el corazón de la Torá.
·
·
Capítulo 3: Revela de manera asombrosa cómo estos
dos aspectos también existen en el pueblo de Israel y en Di-s mismo, mostrando
que "todo es uno" (donde las dos caras de Dios mismo son Israel y la
Torá).
·
·
Capítulo 4 (un "bonus" añadido después de
la lección): Explora la cuestión de "el oro adquiere la plata",
ilustrando cómo la fuerza del cambio basada en la capacidad de reconocer un
error y cambiar de opinión, aparece en Rabí Iehudá Hanasí, quien lideró la
primera revolución.
Antes de la lección hubo un panel
fascinante con estudiantes del rabino que hablaron sobre la cuarta revolución,
y las palabras del rabino incluyeron referencias a las ideas expresadas en ese
panel. Se recomienda a todos ver o escuchar la lección.
1. FORTALEZA REVOLUCIONARIA
Las dos tareas de nuestra generación:
Moadim Lesimjá a todos, que este año traiga
muchas buenas noticias. Observé de lejos el panel que tuvo lugar aquí y, al
final, se habló de las dos misiones importantes que tenemos hoy. No las
mencionaré en orden de prioridad, sino según su relevancia actual:
1. La primera misión es que debemos vencer a nuestros
enemigos, asegurando que tengamos "Didan Notzaj" (la victoria
es nuestra).
2. La segunda misión, que es el tema de esta noche,
se refiere al aspecto complementario: abrir las puertas y difundir los
manantiales hacia afuera, hasta un nivel en que no haya ningún límite o
frontera[1].
Esta tarea también implica romper las barreras absolutas que han existido hasta
ahora entre la Torá del pueblo de Israel, el pueblo elegido y la humanidad en
general. Todo esto para que pronto podamos alcanzar el propósito profético[2]:
"כִּי אָז אֶהְפֹּךְ אֶל עַמִּים שָׂפָה בְרוּרָה לִקְרֹא כֻלָּם
בְּשֵׁם הוי' לְעָבְדוֹ שְׁכֶם אֶחָד"
"Porque
entonces devolveré a los pueblos un lenguaje claro, para que todos invoquen el
nombre de Hashem y lo sirvan como unidos."
El vínculo entre estas dos tareas, vencer a los enemigos y acercar al
mundo entero, se puede expresar en el principio de "Apartarse del
mal y hacer el bien".[3]
En términos simples esto significa que el orden es primero "apartarse
del mal" y luego "hacer el bien": primero venceremos
a los enemigos y después nos ocuparemos de hacer el bien a todo el mundo.
Cumpliremos con la continuación del versículo: "Busca la paz y
persíguela"[4],
lo que incluye la idea de perseguir “en otro lugar”, es decir, ir lo más
lejos posible para difundir la paz y el bien.
Sin embargo, como escuchamos anteriormente del rabino Iosi,
editor del libro, según el camino del Baal Shem Tov debemos cumplir "apartarse
del mal" a través de "hacer el bien"[5].
Explicamos que aquí hay dos formas de depuración, como se explica en
Jasidut[6],
“Apartarse del mal" como preparación para "hacer el
bien" es como separar los desechos de los alimentos; primero
eliminamos a todos los enemigos y luego nos ocupamos de quienes queden.
"Apartarse del mal" mediante "hacer
el bien" es como separar el alimento bueno de los desechos,
invirtiendo en lo 'bueno' de manera que cause el rechazo y la
eliminación de los enemigos. De hecho, el enfoque de "apartarse del
mal" a través de "hacer el bien", que implica
seleccionar el alimento de entre los desechos está permitido en Shabat.
Mientras que el trabajo de "separar" (בורר,
borer), que está prohibido en Shabat, consiste en tomar los desechos y
extraerlos del bien.
De todos modos, como escuchamos anteriormente de todos los
oradores, hoy en día debe haber una clarificación dentro de las naciones, quién
se acerca a Hashem a través de su conexión con el pueblo de Israel y la
aceptación de la Torá de Israel y quién es enemigo del pueblo de Israel (y por
lo tanto, enemigo de Hashem[7]),
cuyo destino es ser rechazado.
El motor de las revoluciones, el atributo de la fortaleza
El tema de esta noche es la pregunta: ¿Qué fuerza en el
alma impulsa todas nuestras revoluciones?
De hecho, desde la primera revolución de nuestro sagrado
maestro, Rabí, Rabi Iehuda Hanasí, quien innovó al permitir y ordenar que se
escriba la Torá Shebeal Pe (la Torá oral) para que la Torá no sea olvidada
en el pueblo de Israel, todas las revoluciones son impulsadas por la
interpretación del versículo:
"Es tiempo de
actuar en aras de Hashem, derogaron Tu Torá"[8]
עת לעשות להוי' הפרו
תורתך
Para que la Torá no se olvide en Israel es necesario violar
la prohibición de escribir la Torá Shebeal Pe (la Torá Oral)[9].
Luego vino la segunda revolución, según la cual un sabio o
rabino puede – incluso está permitido y es una mitzvá para él – recibir sustento
de la comunidad. Gracias a esta revolución, hoy en día, ya desde hace muchas
generaciones, especialmente desde el Beit Yosef (el autor del Shulján
Aruj), tenemos gran cantidad de kolelim (institutos de estudio de
Torá), así como organizaciones rabínicas en cada ciudad.
La tercera revolución, que todavía es muy actual, es la educación
de las niñas, el estudio de la Torá para las mujeres. El Rebe dijo
explícitamente[10] que esto
es un signo de la redención, el ascenso de maljut, la parte femenina, hanukva
(הנוקבא).
De hecho, esta revolución está vinculada al núcleo mismo
del Jasidut desde el Baal Shem Tov. Como se describen los principios de la
educación de las mujeres en el sefer hazijronot (libro de memorias) del Rebe
anterior[11].
Él describe que entre las hijas de los jasidim había verdaderas eruditas
que incluso dictaban halajá frente a grandes rabinos.
Esta es la inspiración para esta revolución, además del Jafetz
Jaim, quien dictaminó que ya había llegado el momento en que era
obligatorio enseñar a las mujeres, aprobando así el cambio. También el Rebe
de Gur de entonces, autor del Imrei Emet y también el Rebe
anterior de Jabad, el Admur HaRaiatz (Rebe Iosef Itzjak Schneersohn)
– todos, de manera unánime, dijeron que ahora debemos comprometernos con esta
misión que lleva al hombre y a la mujer a un estado de "igualdad en su
altura", en términos de la Cabalá. Nuevamente, como ya hemos dicho,
esto es un signo de la redención.
Todo el orden de la historia del mundo es en un orden de
ascenso[12].
Hay un descenso de las generaciones, pero al mismo tiempo, también hay un
ascenso de las generaciones[13].
El ascenso de las generaciones es la elevación de maljut, y cuando maljut
asciende también asciende cada vez más toda la realidad - todas las sefirot,
todos las estructuras de las sefirot, los partzufim, hasta el infinito.
Por supuesto, también la cuarta revolución – la difusión de
la Torá a todo el mundo, que causará la elevación de toda la humanidad - es
parte del ascenso de las generaciones. Y cuando todo ascienda lo suficiente,
aparecerá la 'luz nueva sobre el monte Sión'[14]
del Rey Mashíaj.
Pero además del versículo 'Es tiempo de actuar en aras
Hashem, porque se ha violado Tu Torá', que se explica detalladamente en el
libro y cómo está profundamente relacionado con todas las revoluciones, ¿cuál
es la principal fuerza psíquica (nafshí) que impulsa estas
revoluciones?" ¿Cuál es la característica principal de la Torá misma que
nos exige avanzar, renovarnos, elevarnos y cambiarnos? Está escrito[15]:
“Hashem
dará fuerza a Su pueblo, el Señor bendecirá a Su pueblo con paz”
הוי' עֹז לְעַמּוֹ יִתֵּן
הוי' יְבָרֵךְ אֶת עַמּוֹ בַשָּׁלוֹם
Para llegar a la paz, primero se necesita fortaleza. Para
provocar una revolución, avanzar y cambiar, se necesita el atributo de la fortaleza
en el alma.
En nuestro contexto agregamos que la palabra 'Oz', עז (fuerza) alude a dos versículos que se
explican mutuamente: la 'ע' de Oz alude
al versículo fundamental aquí, 'Es tiempo de actuar en aras de Hashem, porque
se ha violado Tu Torá' (Salmo
119:126), y la 'ז' alude al versículo
al final de la profecía de Malají[16]:
'Recuerden
la Torá de Moshé, Mi siervo' (con la zain
grande)
זכרו תורת משה עבדי
(ב-ז רבתי).
El motivo aquí de "Es tiempo de actuar en aras de
Hashem, porque se ha violado Tu Torá" es que la Torá no se olvide de
Israel, "Recuerden la Torá de Moisés, Mi siervo".
La Fortaleza y la Humildad
Decimos en la oración "האדרת
והאמונה, haaderet vehaemuna", hubo tzadikim que lo decían
todos los días[17]: העז והענוה
לחי עולמים, "La fortaleza y la humildad
para la vida eterna". La fortaleza va junto con la humildad. Es una
especie paradoja: una persona con fortaleza de santidad es fuerte y firme,
características que no asociarían precisamente con la humildad. Pero según esta
oración parece que la verdadera fortaleza sagrada viene acompañada de humildad.
Hay fortaleza de la impureza (klipá) y hay fortaleza
de santidad (kedushá), y la humildad es lo que las diferencia. La
primera ley en el Tur (y en la última edición del Shulján Aruj
del Admur Hazaken) es la enseñanza de Yehuda ben Tema: 'Sé fuerte como un león'[18],
"No debes avergonzarte por los que se burlan"[19],
uno debe ser fuerte. Incluso está escrito que Israel es "el más fuerte de
las naciones[20]",
no hay fortaleza como la fortaleza judía. Cuando la fortaleza está depurada va
junto con la humildad.
¿Dónde vemos de manera más clara la conexión entre fortaleza
y humildad? Como veremos más adelante se necesita mucha fortaleza para admitir
un error, o incluso simplemente admitir públicamente que estoy cambiando de
opinión, que ahora se requiere un cambio, esta es, de manera clara, una fortaleza
que solo proviene de la humildad.
Abraham Avinu, el primer judío tenía una gran humildad - él
dice 'Y yo soy polvo y ceniza'[21],
el primer ejemplo de humildad en la Torá, pero junto con su humildad tiene fortaleza.
Primero rompe los ídolos de su padre,[22]
luego es 'Abram el hebreo'[23],
'todo el mundo estaba de un lado, y él estaba del otro lado'[24],
se encuentra en el lado opuesto a todos pero sale de su propio pasado, rompe
los límites y las barreras, y proclama la Divinidad en el mundo. ¿De qué poder
del alma proviene esto? Se puede decir que todo proviene del amor, debido a su
amor por todas las criaturas comparte con todos. Pero, de todas maneras, ¿de
dónde obtiene la fuerza para actuar de esta así? Es la fortaleza de santidad[25].
Abraham nuestro patriarca es un excelente ejemplo de 'la fortaleza y la
humildad', demostrando que, en la santidad, la fortaleza y la humildad van de
la mano. El humilde atribuye todo al mérito del Altísimo, recordando que 'pues
Él es quien te da la fuerza para triunfar'[26].
Es el reconocimiento de que cuando hago algo con fortaleza y valentía, todo
proviene de Él, bendito Es.
Acercamiento desde la fortaleza
Ahora mencionaremos un importante indicio: cuando la Torá
menciona simplemente 'festividad, jag, חג' sin
especificar, se refiere a la festividad de Sucot. Si está escrito simplemente
'festividad' sin añadir algo como 'la festividad de Pesaj' o 'la festividad de
Shavuot', la intención es la festividad de Sucot, el 'tiempo de nuestra
alegría' sobre la cual está escrito 'y te alegrarás en tu festividad[27]'.
En Cabalá, la palabra 'jag' (fiesta) חג, una palabra simple
de dos letras, a menudo es un acrónimo de 'Jesed-Guevurá' חסד-גבורה (Bondad-Poder).
"חסד
דרועא ימינא, גבורה דרועא שמאלא",
Jesed de la
mano derecha, Guevurá de la mano izquierda[28]
En Guevurá también hay un significado de 'la
izquierda rechaza'[29],
mientras que en Jesed hay un significado de acercar y abrazar, 'Su mano
derecha me abrazará'[30].
Está escrito [31] que
los Días Temibles son "Su izquierda bajo mi cabeza",
mientras que la festividad de Sucot es "Su mano derecha me abraza".
En principio, cuando hablamos de acercar a todos, este es un
mensaje de 'su mano derecha me abrazará' (un símbolo de cercanía y amor), pero
cuando hablamos de separación, parece más una manifestación de severidad (Guevurá).
Sin embargo, ahora diremos un mensaje un poco al revés: Como escuchamos en el debate,
la cuarta revolución nos exige salir al mundo después de persecuciones durante
miles de años, después de la Shoá, que Dios tenga misericordia del resto
sobreviviente de Su pueblo elegido, de Sus hijos. Si decimos que ahora debemos
romper las barreras, 'que se difundan tus manantiales hacia afuera[32]',
¿de dónde viene la fuerza para hacerlo? ¡Solo de la fortaleza y audacia, azut,
עזות! Se necesita mucha fortaleza, guevurá,
para hacer esto. Por más que sea un mensaje de acercamiento, de abrazo, de
bondad, la bondad por sí sola –incluso la bondad de nuestro patriarca Abraham–
no logrará nada, también se necesita fortaleza. A veces se necesita fortaleza
para amar y acercar[33].
En realidad, el motor de todas las revoluciones de las que
hablamos, que escribimos en el nuevo libro, es la fortaleza de decir que las
decisiones halágicas de la Torá cambian de un extremo al otro, de un opuesto al
otro opuesto. ¿Por qué? Porque ha llegado el momento. ¿Quién determina esto?
¿Quién lee el mapa verdadero? Los grandes sabios de Israel en cada generación: Rabi
leyó la primera revolución; el Beit Yosef leyó la segunda revolución; los
justos que mencionamos antes, junto con una mujer que debe ser recordada, Sara
Schneirer שרה שנירר, bajo la autoridad
del Rabí de Gur, leyeron correctamente el mapa y, con mucha audacia, llevaron a
cabo la revolución. Sobre esta revolución de la Torá está escrito: 'Hashem dará
fortaleza a Su pueblo'. [Tehilim 29:11]
[1] Expresión
habitual en las sijot del Rebe de Lubavitch
[2] Tsefania
3:9 (צפניה ג, ט)
[3] Tehilim
34:15 (תהלים לד, טו)
[4] Ierushalmi Pea 1:1; Bamidvar Rabá
19:27 y Tanjumá Jukat 22
[5] Beit
Aharon, Lekutim Kamo, 1. Y veáse también la santidad del Iom Tov, Parashat
Metzora, y “convertir la oscuridad en luz”, capítulo 7
[6] Véase el
continuación de Taarovot (Taaruvot) parte 2, sección A, desde la página
48 en adelante. Allí, página 60 en adelante. Y en Kuntres Ajaron en Da'at
Jojmá (y veáse también Sh'fat Emet, Shmini 1898, respecto a los
conversos)
[7] Véase,
por ejemplo: Zacarías 2:12; Bamidbar Rabá 22:2; Rashi sobre Bamidbar
10:35. Y en otros lugares
[8] Tehilim
119:126
[9] Guitin
60b. Véase introducción del Rambám al Mishné Torá
[10] Discurso
de Shabat Parashá Emor, 5750 (1990) (Toras Menajem, Vol. 3, pág.
174)
[11]En el
contexto de las enseñanzas del Rebe de Lubavitch, פצ"ג tiene un significado profundo y espiritual, ya que se
refiere a "פנימיות צורת גאולה" (Pnimiyut Tzurat Geulah),
que puede traducirse como "La esencia interna de la forma de la
redención".
[12] Sobre
las cuatro revoluciones mismas como un orden interno de ascenso, consulta en el
segundo volumen de la clase – impreso más adelante
[13] Véase Pri
Tzadik (del rabino Tzadok de Lublin), en el capítulo de Ve'Atjanan,
sección 21, y en el capítulo de Ki Tavo, sección 16 (en nombre
del Rebe de Preshischa), Jasdei David HaNe'emanim, volumen 5,
página 105. Y en otros lugares.
[14] Finalización
de la bendición 'Iotzer Or' según el rito Ashkenazí (y ver su
explicación en Da'at Jojmá – aunque no está en el rito de Arizal
– en Likutei Torá Cantar de los Cantares 9:2, al final de Likutei
Beurim de la introducción de 'Derej Jaim', y otros)
[15] Tehilim
29:11
[16] Malají
3:22
[17] Véase
acerca de Rabí Meshulam Iguer – que su memoria sea una bendición (Perlov) 18 de
Tishrei. Y también vean Peat HaJaim (sección de los zmirot,
capítulo 4); Maté Efraim sección 619 y 515. Y más...
[18] Avot 5:20
[19] Shuljan
Aruj, Oraj Jaim, siman 1:1(versión del Ramá)
[20] Beitzá 25b
[21] Bereshit 18:27
[22] Bereshit Rabá 38:13
[23] Bereshit 14:13
[24] Bereshit Rabá 42:8
[25] Y una alusión: amor -
valentía (אהבה-עזות) - dos cualidades de
Abraham - elevan a maljut מלכות
(reinado) que asciende 'Abraham, Abraham' "אברהם אברהם" (Génesis 22:11), es decir, que Abraham
es el intermediario aquí.
[26] Deuteronomio
8:18
[27] Deuteronomio
16:14
[28] Introducción
al Tikunei Zohar ("Pataj Eliahu")
[29] Sotá
45a; Sanedrín 107b; Zohar, parte 3, 167b
[30] Cantar
de los Cantares 2:6; y allí 8:3
[31] Zohar,
Parte 3, página 126b; Sha'ar HaKavanot, Drashot Rosh HaShaná,
Capítulo 1.
[32] Proverbios
5:16
[33] Veáse Torat
Emet, volumen 9, página 3. ראה תו"א ט, ג
ובכ"ד
ESTUDIO DE JUDAÍSMO PARA TODOS PARASHÁ
LA VIDA DE SARÁ Y LAS MEZCLAS DE LAS ALMAS
La parashá comienza con las palabras "ויהיו חיי שרה" ("Y fueron los años de la vida
de Sará"). Los comentaristas preguntan: ¿Por qué el nombre de la parashá,
"Jaiei Sará" (la vida de Sará), se centra en su vida, cuando en
realidad comienza relatando su fallecimiento? Desde una perspectiva jasídica,
esto nos enseña una lección profunda sobre la verdadera esencia de la vida.
La vida de un tzadik (una persona justa), como la de nuestra
matriarca Sará, no termina con su fallecimiento físico. Al contrario, sus
logros espirituales, su influencia, su bondad y su dedicación a la misión
divina permanecen vivos en este mundo. La Torá recalca que "חיי שרה" son eternos, porque los frutos de su vida —la fe, la
educación de su hijo Itzjak, y su impacto en su entorno— continúan incluso
después de su partida.
El Ba'al Shem Tov enseña que la vida verdadera de una
persona se mide por su conexión con la divinidad y cómo esa conexión se
manifiesta en su legado espiritual. La "vida" de Sará está presente
en la continuidad de las generaciones que siguen sus caminos de fe y justicia.
En términos prácticos, la enseñanza para nosotros es clara:
el impacto de nuestras acciones justas trasciende el tiempo. Cada mitzvá
(precepto) que cumplimos, cada acto de bondad que realizamos, deja una huella
eterna en el mundo. Así, nuestras vidas también pueden ser "Jaiei
Sará" —vidas llenas de propósito y eternidad.
LECTURA DE LA TORÁ JAIEI SARÁ - LA VIDA DE SARÁ 5785_1
127 AÑOS Y LA DIVISIÓN POSITIVA
La parashá Jaiei Sará (Génesis 23:1–25:18) contiene
varios temas y eventos significativos relacionados con la vida y el legado de
los patriarcas y matriarcas. A continuación, los puntos principales:
1. Muerte de Sará y
compra de la cueva de Majpelá (Génesis 23:1-20)
- Muerte de Sará:
Sará fallece a los 127 años en Hebrón (Kiriat Arba).
- Compra de la
cueva: Abraham adquiere la cueva de Majpelá como lugar de sepultura para Sará.
Negocia con Efrón el hitita y paga 400 siclos de plata. Este evento establece
un vínculo legal y duradero con la Tierra de Israel.
*Una Historia
Jasídica para Despedir al Shabat*
🍷🕯🌿
*Comparte esta hermosa historia* 🌿🕯🍷
*_Es costumbre contar
una historia jasídica sobre el Baal Shem Tov al terminar Shabat por la noche en
una comida de Melavé Malká, acompañando a la Reina, el Shabat_*
*_Una segulá para un
buen sustento, para tener hijos y tener satisfacciones de los niños, para una
vida buena y larga y para salud_*
MARAVILLAS BAJO LA LLUVIA
En la casa de estudio de Rabi Baruj de Mezhibuzh, nieto del
Baal Shem Tov, había un jasid sabio y temeroso de Dios. Este jasid deseaba
aprender de Rabi Baruj las enseñanzas de la Torá y el servicio a Dios según los
caminos de la Jasidut heredados de su abuelo, el Baal Shem Tov. Este jasid
acompañaba a su maestro en todos sus viajes.
En una ocasión, regresando a Mezhibuzh después de un viaje,
el jasid reflexionó:
” He presenciado personalmente las obras maravillosas de mi
rabino. Si esto es así, ¿qué tan superior pudo haber sido el poder del Baal
Shem Tov en comparación con el de su nieto, mi maestro?”
Cuando se acercaban a la ciudad, el jasid necesitó
detenerse. Se bajó del carruaje y entró al bosque. Mientras él estaba lejos,
Rabi Baruj le indicó al cochero que continuara sin esperar al jasid.
Cuando el jasid salió del bosque vio que se había quedado
solo y comenzó a caminar hacia la ciudad bajo una fuerte lluvia. Llegó empapado
hasta los huesos a las afueras de la ciudad y vio una casa solitaria. Buscando
refugio, entró y encontró a un anciano judío estudiando el Talmud.
El anciano le dio la bienvenida y tras un breve intercambio
el jasid le mencionó que era seguidor de Rabi Baruj. El anciano, sin embargo,
comentó que no lo conocía, pero sí conocía al Baal Shem Tov y comenzó a
relatarle una experiencia única:
“Cuando el Baal Shem Tov llegó a Mezhibuzh su fama se
extendió rápidamente, pero yo, absorto en mis estudios, no me interesé en
conocerlo. Una noche cálida después de Shabat mientras caminaba para despejarme
terminé cerca de la casa del Baal Shem Tov. Decidí entrar. Lo vi rodeado de
mujeres que le contaban sus dificultades y él escuchaba pacientemente. Pensé:
‘¿Cómo puede un hombre tan grande ocuparse de estas trivialidades cuando
debería estar inmerso en estudio y plegarias?’
Decidí seguir caminando hasta la casa de estudio del Baal
Shem Tov y allí vi a un hombre rezando el Tikun Jatzot, el estudio
después de la medianoche, con una devoción tan profunda que quise saber quién
era. Miré su rostro y para mi asombro era el Baal Shem Tov. Corrí de vuelta a
su casa y lo encontré nuevamente hablando con las mujeres. Regresé al estudio y
allí seguía rezando. Este ir y venir me mostró la grandeza del Baal Shem Tov:
estar en dos lugares al mismo tiempo. Desde ese momento comprendí por qué era
llamado el ‘Baal Shem Tov’.”
El anciano continuó con otra historia personal:
“Tiempo después comencé a sufrir una visión perturbadora al
rezar el versículo ‘Shemá Israel’. Cada vez que lo pronunciaba veía un
crucifijo frente a mí. Esto me llenó de tristeza y angustia. Intenté con
plegarias, ayunos y penitencias, pero nada funcionaba. Finalmente, acudí al
Baal Shem Tov quien me aconsejó ayunar durante una semana entera, de Shabat a
Shabat. Seguí sus instrucciones y al concluir el ayuno durante la comida de
Shabat la visión desapareció y nunca volvió. Así comprendí aún más la grandeza
de este tzadik.”
Al terminar su relato el jasid comprendió por qué su rabino
lo había dejado en el bosque: para enseñarle la grandeza del Baal Shem Tov.
¡No es casualidad!
En una ocasión, durante la lectura de la Torá en Simjat
Torá en la corte de Rabí Yosef Itzjak Schneersohn (el Rebe Rayatz),
sucedió que al abrir el primer rollo para leer “Vezot Haberajá”, se
descubrió que habían tomado el rollo de Bereshit. Por lo tanto,
tuvieron que desenrollar el rollo desde el principio hasta el final para llegar
a la lectura correcta.
El pensamiento de que esto fue simplemente una casualidad es
la manifestación de la klipá (fuerza negativa) de Amalek.
Fuente: Sefer Hasijot 5704, pág. 42
Presentado por el Instituto “Or HaJasidut”.
*❣️Shavua
Tov uMevoraj (buena y bendecida semana)❣️*
*💎💎Para
la elevación del alma de💎💎*
*MOSHE CALMEN BEN
ITZJAK.*
*💎💎 PARA
CURACIÓN COMPLETA DE💎💎*
*ITZJAK FEIVISH
BEN BREINA MALKA* y
*Jaim Peisaj
Eliezar ben Jana Berim*