LA MEDITACIÓN JUDÍA
LA RESPIRACIÓN Y LAS SEFIROT
JEDVÁ - חדוה
¡Bien! La razón de que hoy
nos ocuparemos de la respiración es que bajando a San Diego esta
mañana, veníamos por la ruta 405 que es el valor numérico de
neshimá,
[נשימה],
“respiración”. Y equivale en guematria a iehí
rakía,
[יהי
רקיע],
“Qué haya un firmamento”. Como dijimos, éste es el firmamento cuyo nombre es, también, “firmamento”, rakía.
Por lo que en particular
ésta, la
segunda de las aserciones explícitas de la creación, יהיה
רקיע,
“Ihié
rakía”,
“Que haya un firmamento”, es igual a “respiración”, neshimá,
405.
Continuamos ahora con las
letras. Las
letras pertenecen a ese rakía
[firmamento] que se llama, explícitamente, Raki'a, el segundo, desde
abajo. Y como hemos dicho, las letras empiezan con la alef
que en el
Libro de la Formación, Sefer Ietzirá, representa el aíre de la
respiración, el espíritu de la respiración. Y aquí, tenemos un
ejercicio muy práctico de respiración que podemos comprender y en
el que podemos tratar de integrar toda la información que estamos
dando ahora.
Como se enseña en Cabalá,
la respiración,
el proceso de la respiración consta de 4 etapas. Todo ello se lleva
cabo como un círculo en la mente -por así decirlo- dentro de la
cabeza. Aunque el aire baja a los pulmones, y luego sube para ser
procesado y ser enviado a su miembro correspondiente con el fin de
despertar su sentido correspondiente.
Las cuatro etapas de la
respiración son sheifá
[שאיפה],
que significa “inhalar”. [No está conectado con shefa
[[שפע]].
Sheifá
significar inhalar. También significa aspirar a, desear, aspirar,
lishof.
Y como proceso físico, una parte de la respiración que significa
inhalar.
Después viene blimá
[בלימה],
retener el aire, retener nuestra respiración. Ésta es una de las
palabras básicas en el Sefer
Ietzirá,
la palabra de las eser
sefirot blimá [“Diez
sefirot
de blimá”].
Cada una de las diez sefirot
es llamada una contención, cada una se retiene, se controla, se
define perfectamente. Eso es llamado blimá.
Después viene neshifá
[נשיפה],
que es exhalar.
Y después viene menujá
[מנוחה],
que significa literalmente “descanso”. Y descanso significa que
antes de que uno empiece el ciclo otra vez, hay un momento, o unos
momentos de descanso entre ellos.
Por lo tanto, éste es un
círculo, un
proceso de 4 etapas. En las Sefirot,
ésto es Kéter
[corona], Jojmá
[sabiduría], daat
[conocimiento], y biná
[entendimiento].
Significa que se crea
un ciclo como éste... Desde Keter
[corona], sheifá
[inhalación] está a nivel de la voluntad, aspiración; es Keter,
el punto número 1. Después viene el poder de retener. El poder
de retener es Jojmá
[sabiduría], tzimtzúm
[contracción].
Y después la exhalación es
daat
[conocimiento], debajo de la inhalación. Y el descanso, que es
opuesto a retener la respiración, es biná
[entendimiento],
que en Cabalá se llama el
“Mundo por Venir”, el mundo del descanso. Menujá
lejaiei haolamim [“El
Descanso de la Vida Eterno”].
Y después vuelve a aspirar
de nuevo, que
es tener una nueva voluntad. Desear una nueva realidad, una nueva
fase de la vida. Cada inhalación es un acto de voluntad, de
aspiración, aspirando a lograr un nuevo nivel de vida. Y esa es la
forma en que funciona.
¿Por qué funciona así?
Porque el verso básico en que se basa la respiración, en toda la
Torá, es el último verso de los Salmos que dice:
Kol haneshamá tehalelKá, Haleluká,
“Toda alma Te alabará,
Haleluká”
“Cada
alma…”, y Jazal [los sabios] dicen: “No leas 'el alma'
[haneshamá],
sino 'kol
haneshimá',
que significa: ‘Cada simple respiración de vida, alabará a
Dios’”. ¿Y que Nombre se usa allí para Dios? Iud
hei [י-ה].
Donde Iud
[י]
y hei
[ה]
son las primeras dos de las cuatro letras del Nombre Esencial de Dios
Havaiá.
Sólo esas dos letras están citadas [en este verso].
Y esas dos letras
son las letras de la mente, de jojmá
[sabiduría] y de biná
[entendimiento].
Por lo tanto, de aquí
aprendemos que todo el proceso de la respiración es un ciclo
alrededor de las dos letras iud
[י]
y hei
[ה].
Kol haneshamá, kol haneshimá
tehalel iud hei,
Haleluká.
Ésta es la iud
[י]
y ésta es la hei
[ה].
Pero esto es el kotz
[punta] de la iud,
la corona sobre la iud,
desde donde se inicia. Y este es el “sendero inferior” de la iud,
llamado shvila
[sendero] de la iud.
Cuando escribimos la י,
iud,
si ustedes ven aquí..., una iud
tiene un punto superior y tiene un sendero inferior. Esto se llama
un shvil,
“sendero”, en la parte inferior que se conecta a la hei.
Entonces, en realidad todas estas tres etapas, sheifá
[inhalación], blimá
[retención], neshifá
[exhalación], son todos los elementos de la iud:
el kotz
[punta] de la iud,
y el cuerpo de la iud,
y el shvil,
el camino inferior de la iud
que la conecta a la hei.
La menujá,
el descanso del final, es la hei
misma.
Y así, cada respiración es
una expresión y una alabanza de iud
hei. Kol
haneshamá tehalel iud hei, haleluká.
¡Bien! Aquí, ahora hay
muchas muchas alusiones
en cuanto a estas palabras y sobre lo que significan pero no
entraremos en eso ahora.
Entonces ahora la cuestión
es que para
hacer de esto un ejercicio viable, debemos imprimirle cierto ketzev,
cierto “ritmo” al proceso. Y, por muchas razones, una vez más,
en las cuales no podremos entrar del todo, sólo dar algunos atisbos.
Por ejemplo el ritmo básico,
esto no dice cuánto tiempo es cada etapa, sino sólo la proporción
entre ellas. Los lapsos pueden ser más largos y entonces toda la
respiración se hace más larga. Pueden ser más cortos, y así todo
el proceso de respiración, todo el ciclo se hace más corto. Pero el
coeficiente, la proporción de pulsos que uno cuenta para sí mismo,
por así decirlo, hasta que comienza a respirar de manera natural sin
tener que hacer el conteo, es 8 a 4 a 6 a 5, que deletrea la palabra
jedvá
[חדוה].
Jedvá es “alegría”.
Jedvá:
La primera de las cuatro etapas de la alegría.
¿Tenemos aquí en la
audiencia
alguien con el nombre Jedvá?
[Jedvá]
es un nombre de mujer.
Aunque este es un proceso en
la mente, respirar es un ejercicio femenino.
Es todo femenino. Es todo Jedvá.
Sólo para explicar lo que
significa [Jedvá]
como un nivel de alegría. Hay muchas palabras diferentes y sinónimos
para alegría [en hebreo]. La cosa sencilla que estamos tratando de
hacer ahora es que cuando respiramos mediante el uso de esta palabra
“Jedvá”,
como nuestro marco básico de referencia, como nuestro pulso y
latido, quiere decir que la propia respiración despertará e
influirá en nuestras almas la experiencia de la alegría. Es la cosa
más simple.
De modo que respirar alegría
es experimentar alegría.
Vamos a tratar de entender qué nivel de felicidad... Hay muchas
palabras diferentes, hay incluso 10 [sinónimos de “alegría”].
Aquí tenemos 4. De los 10 diferentes sinónimos en lengua hebrea que
significan felicidad, como dice el Midrash, hay básicamente en
Cabalá 4 etapas de la manifestación de la alegría y de la
felicidad.
Todos estos son 4 niveles
de “Madre” [el principio madre, אמא].
El concepto completo de felicidad en todos sus niveles es un concepto
madre, [que corresponde en particular a] [la letra] hei
de las
[primeras dos letras de Havaiá]
iud hei.
Pero la madre misma, como toda categoría de partzuf
completo, posee todos los niveles de sabiduría, de entendimiento, de
emoción [las sefirot emotivas] y de revelación, maljut
[el reinado].
Por lo tanto, los cuatro
niveles de madre,
que es la sabiduría de la madre, el [principio] padre dentro de la
madre y la madre [el entendimiento] de la madre y los hijos [las
sefirot emotivas] están impregnados dentro de la madre, también el
hijo [la sefirá
de la belleza] dentro de la madre y la hija [la sefirá
del reinado] dentro de la madre.
Esos son los 4 niveles de
[sinónimos de alegría]
jedvá,
gila,
simjá, sason.
Lo cual significa literalmente, que primero hay un punto, una punta.
¿Cuál es la expresión anterior? Son filos agudos, punzantes. Jedvá
[חדוה]
viene de la palabra jad
[חד],
que significa “filo” o “agudo” de alegría, la primera
experiencia inicial del punto de alegría es de un filo cortante de
alegría.
Ése es el tipo de alegría
que te produce piel de gallina; por eso esta palabra es la que se
dice de Itró que se allegó al pueblo judío antes de la entrega de
la Torá. Y dice: Vaijad
Itró
[ויחד
יִתְרוֹ],
“Se alegró mucho, se llenó de una tremenda alegría cuando
escuchó todos los grandes milagros que Dios hizo a nuestro
pueblo judío”.
Y Jazal
[los sabios] dicen que esa palabra vaijad
[ויחד],
es ese estado de alegría, significa que todo su cuerpo se puso de
piel de gallina: jidudin,
jidudin
[חדודין
חדודין].
Esto se llama experimentar una aguda alegría. Ese el punto de la
alegría. Por eso jad
[חד]
es como ejad
[אחד],
que es “uno”, un punto. El punto de felicidad, que es la Jojmá,
la sabiduría de la felicidad. El filo agudo inicial de la felicidad.
Luego viene el nivel número
2 que es gila
[גילה].
Una palabra que siempre se refiere a la alegría tal como se siente
llenando el corazón. Y se vuelve evidente y revelada en el corazón.
La palabra gila
también significa gilui
[גילוי],
que es “revelación”. Pero se refiere a la revelación de la
alegría en el corazón mismo antes de que la alegría se expanda
para manifestarse en los miembros del cuerpo. Significa que esto es
todavía una sensación personal. Todavía no es visto como una
expresión externa por el observador. Eso es gila,
la alegría que llena el corazón.
Luego viene simjá
[שמחה].
Simjá
es cuando estalla. La alegría en toda su grandeza estalla desde el
corazón para expresarse en los órganos del cuerpo: el palmoteo de
las manos, el baile de los pies, el canto de la boca, eso es simjá.
[Simjá
es] el hitpashtut
[“la expansión” de la alegría] en los eivarim,
en los órganos del cuerpo.
Luego, hay un punto donde
esta alegría llega al máximo, a la cima, a su culminación. Ese
punto máximo de culminación de la alegría es llamado sasón
[ששון].
Por lo tanto esta es en general una meditación muy importante y un
proceso en sí mismo para entender el proceso de la alegría en el
alma, la felicidad en el alma como una experiencia.
Una vez más, son 4 niveles
que en general corresponden a “Madre”. Significa, la sabiduría
de la madre y el entendimiento de la madre. La sabiduría es la
experiencia aguda inicial de la alegría, el punto de la alegría. Y
luego el llenado del corazón; el corazón es la madre, la biná
shebebiná
[el entendimiento del entendimiento]. Y después se extiende y
expande a los miembros, que son las midot
[el aspecto emotivo que corresponde] a la [letra] vav
de Ima
[el principio madre]. Y finalmente, el cénit que es realmente iesod
ima [el
fundamento de madre].
Nuevamente ¿cuáles son las letras? Las letras
son, jet
ח, dálet
ד, vav
ו, y hei
ה, 8, 4, 6 y 5.
Éste es el ritmo, el pulso relativo de la respiración. Esto
también se llama en Cabalá “el tikún
[rectificación] de Javá
como Jaiá”.
Está dicho que si Eva, la primera mujer, no hubiera pecado su
nombre, en vez de ser Javá,
jet vav hei
(חוה) [sería
Jaiá] -si uno respirara omitiendo la segunda etapa, la contención
de la respiración, entonces tendríamos aquí a Javá,
Eva- pero si no hubiera pecado, habría sido llamada Jaiá (חיה)
que es también un nombre, [cuyo valor es] 23.
¿Qué es Jaiá? Jaiá (חיה)
es añadir a Javá (חוה),
una dálet [ד].
Porque la dálet
[ד, 4] y la vav
[ו, 6] juntas
son una iud [י,
10] por lo que el nombre Javá
(חוה), se
transforma en Jaiá
(חיה). Jaiá
es también la experiencia del “aliento de vida”. ¿Qué quiere
decir “Jaiá”? Quiere decir “el aliento de vida”; Donde el
aliento de vida, es uno de los cinco niveles del alma. Es el cuarto
nivel del alma desde abajo. Y esa experiencia del “aliento de vida”
es también, la experiencia de la respiración, la experiencia del
cuarto nivel; o sea, el penúltimo nivel más alto del alma, justo
debajo de Iejidá,
el Único, y Jaiá
es el Viviente.
Y el nivel de la vida, es la revelación, es la
rectificación de Javá,
y eso es un hecho que se produce al añadir su dálet,
lo que significa añadir la habilidad de contener la respiración,
que es realmente la jojmá
[sabiduría] del proceso. Mediante la adición de la dálet
[ד] y
convirtiendo a Javá
(חוה) en
Jedvá
[חדוה] se
llega a Jaiá
(חיה). Ésta
es la razón por la que realmente hay tres nombres femeninos
diferentes, todo ellos son nombres de chicas: Javá,
Jedvá y
Jaiá. Y todas ellas, están
relacionadas entre sí.
¡Muy bien! Por eso, ésta es la forma en la que
nos podemos introducir ahora en este patrón, 8,4,6 y 5. Significa
que la aspiración es una experiencia de un proceso ascendente. La
inhalación, llenando los pulmones, llenando incluso el abdomen, es
una experiencia ascendente. La aspiración es elevarse, y elevarse
normalmente es más difícil, y toma más tiempo, más esfuerzo que
cualquier otra parte de ciclo. Ese el motivo por el cual también es
el periodo más largo del ciclo, y se cuenta 8. Ocho representa lo
supra-natural, señalando que éste es el nivel de Kéter
[la corona], que es la supra conciencia.
Después, viene una proporción, que es llamado
“un entero y medio”. La proporción, el cociente entre la jet
[ח] y la dálet
[ד], el 8 y el
4, es el entero y la mitad. 8 a 4 es como 2 a 1. Significa que la
contención necesita ser sólo la mitad de la aspiración. Entonces,
a través de la contención se integra la aspiración. Ésta es la
proporción más importante en la Torá, que ahora tampoco tenemos
tiempo para explicar, de Abufalia -el mekubal
que mencionamos antes- ésta es la proporción más importante en
toda la Cabalá, “entero / mitad”.
Esto se llama en hebreo
shalem
vajetzi
[שלס וחצי].
Por lo tanto, una vez más, el cociente entre la aspiración y la
contención es este secreto del “entero y medio”. Si Javá
no tiene su dálet,
significa que sólo experimenta este entero y no la mitad adicional
que convierte en completa a la integridad. Como Abulafia explica, uno
de los problemas básicos de la psiquis es la incomprensión de que
la integridad es incompleta sin la adición de la mitad.
Ustedes deben ser “entero y medio” para estar
realmente completos. Ésta es la relación de la jet
a la dálet.
Después, el movimiento descendente, la exhalación es vav,
y el descanso es hei.
La vav,
daat [el
conocimiento], es llamado mafteja
de'kalil shit.
Se llama “la llave (de la conciencia) que abre las seis
(habitaciones)”. Las seis habitaciones son seis estados, seis
espacios, seis lugares, como hemos dicho antes, de la conciencia, que
se convertirán en las seis midot
[cualidades] del corazón.
Eso es da'at,
este punto. Por eso es una vav.
Se llama “la llave que abre las seis”, Mafteja
de'kalil shit.
El versículo correspondiente en Mishlei,
Proverbios, es uvedaat jadarim imalú,
con daat. Las habitaciones deben ser penetradas y llenadas. La
palabra en hebreo para “habitación” [jeder]
es la misma que “penetración”. La palabra para habitación
significa el potencial de penetrar y llenar, “jadira”.
Uvedaat jadarim imalú,
la penetración y el llenado de las habitaciones de la conciencia es
el poder de daat.
Y esa es la exhalación, como explicaremos que, ese poder realmente
envía hacia abajo la letra, hacia el respectivo miembro del cuerpo.
Entonces, el reposo es realmente la expresión espontánea, cuando
una persona es capaz de expresarse espontáneamente sin realizar
esfuerzo, ese el verdadero descanso. El verdadero descanso no es ir a
dormir, ni anularse, ni volverse nada. El verdadero descanso es como
el sol emite su luz espontáneamente, sin esfuerzo alguno. Ese es el
verdadero significado del descanso que uno siente.
¿Qué significa “un
sentido”? El significado es que, si una persona está dotada con un
sentido... Un sentido implica que se comporta y se vuelve espontáneo.
Esa es la manifestación del sentido en sí mismo, cuando la energía
se dirige a su miembro correspondiente. Una expresión es el secreto
de la hei.
Hei es
como los cinco dedos de la mano que abres para que se expresen, para
que se muestren. Por lo tanto, ésta es la enseñanza básica de este
ritmo y pulso de 8, 4, 6 y 5.
Hermosa enseñanza, especial para meditar en ella:terapeutas de la respiracion: octubre 7
ResponderEliminarHermosa enseñanza para meditar en ella : Terapeutas de la respiracion
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